Tras revisar el último informe realizado por nuestros amigos de Ashoka y Pwc, me he permitido transcribir un resumen de lo más significativo
El emprendimiento social ha surgido como un modelo que se encuentra entre el asistencialismo tradicional y la empresa socialmente responsable cuyo objetivo principal continúa siendo la obtención de rentabilidad; es decir, la realización de una labor productiva que mejore algunos de los problemas de la humanidad a la vez que genero rendimiento económico.
En la actualidad, el ecosistema filantrópico mundial pone su foco en la resolución de los principales problemas sociales globales recogidos en los ODS, formulados por el PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) y adoptados por los estados miembros de las Naciones Unidas en septiembre de 2015, definiéndose como la agenda social a seguir hasta 2030. No obstante, recientes estudios de la ONU han sacado a relucir el problema que existe para el cumplimiento de dichos objetivos, dado que se estima que, de los 6,0 trillones de dólares anuales de inversión necesaria para su cumplimiento, existe un déficit de 2,6 trillones de dólares.
“Necesitamos mejorar el reconocimiento y notoriedad del emprendimiento social”
¿Qué podemos hacer para reducir este déficit y llegar a cumplir la agenda social fijada en los ODS?
No hay una respuesta única ante dicha pregunta, pero lo que está claro es que se necesita una mayor involucración y colaboración entre los diferentes actores del ecosistema que permita encontrar soluciones sostenibles, escalables y con la capacidad de generar un cambio sistémico en la sociedad. En este contexto, el emprendimiento social se erige como un modelo clave para la reducción de dicho déficit. Para que pueda alcanzar su máximo potencial en España, y así marcar verdaderamente la diferencia en el cumplimiento de los ODS, vemos necesario que se trabaje en una serie de aspectos:
• Búsqueda y desarrollo de soluciones con un objetivo aspiracional claro de producir un cambio social sistémico
• Mejora del reconocimiento y notoriedad del emprendimiento social como herramienta eficiente para la resolución de los problemas sociales
• Aumento del acceso a financiación a los emprendedores sociales
• Mejora de la capacitación de los emprendedores sociales y sus equipos y su capacidad para captar y retener talento cualificado
• Desarrollo de métricas y metodologías para la medición del impacto sistémico
• Fomento de un marco regulatorio y políticas públicas que faciliten el desarrollo del sector
La idea de emprendimiento social no está todavía muy asentada en España, Organizaciones como UnLtdSpain y Ashoka, con pioneras en nuestro país, pero aún hay mucho camino por recorrer…
Las primeras iniciativas de emprendimiento social fueron identificadas en India y, a diferencia del asistencialismo que se basaba en ofrecer ayuda a individuos a través de la caridad y manteniendo la dependencia de servicios o ayuda externa, el emprendimiento social se basaba en la búsqueda de soluciones innovadoras que empoderasen al beneficiario, y que fueran escalables y replicables, generando un impacto social a gran escala. Por tanto, el emprendimiento social perseguía y persigue un objetivo implícito de sostenibilidad, que permite conseguir la escalabilidad y replicabilidad que se acaba de mencionar. Además, cuando este emprendimiento social es sistémico, produce el cambio en las causas y dinámicas subyacentes del problema al que se quiere dar solución.
A la hora de abordar los problemas sociales, el emprendimiento social lo puede enfocar de dos maneras diferentes:
• Enfoque de solución rápida en el que se identifica un problema social y a continuación se define la solución a dicho problema
• Enfoque de cambio sistémico donde se identifica el problema social y las causas raíz del mismo para, con una visión sistémica, definir una estrategia que permita obtener un cambio en el modo en el que funciona el sistema
El enfoque de cambio sistémico permite no solo generar un impacto directo a través de la organización, sino un impacto indirecto a través de la difusión, cambios en comportamientos y procesos del sistema y reproducción por otros de la idea original. El cambio sistémico surge una vez que ambos impactos llegan a un punto de inflexión donde el impacto creado es lo suficientemente grande para que genere un cambio social irreversible.
Se requiere el desarrollo de iniciativas que, basadas en la generación de impacto social, tengan la capacidad de escalar y replicar su actividad para reducir el déficit en el cumplimiento de los ODS y producir un cambio sistémico en la sociedad:
• Puesta en práctica de principios sociales y empresariales de manera sistémica para dar solución a problemas sociales sin resolver
• Búsqueda de soluciones innovadoras en un entorno de escasez de recursos
• Foco en la búsqueda y desarrollo de soluciones eficientes y de impacto directo e indirecto
• Posibilidad de producir un cambio social sistémico en cualquier lugar del mundo a través de iniciativas de emprendimiento social desarrolladas en otro país o región (escalabilidad y replicabilidad de las soluciones)
• Aparición de colaboraciones inesperadas que no serían posibles en otro contexto (personas, organizaciones público-privadas, etc)
• Objetivo de sostenibilidad social y replicación sistémica a través del escalado de la actividad y, por tanto, del impacto social generado
Sin duda, necesitamos mucha más concienciación y estudios como este para crear un verdadero ecosistema y economía de impacto. Tenemos la oportunidad desde España, de liderar este movimiento a nivel mundial.
¡Un mundo mejor es posible!