El gran tsunami
Aún no se ha tomado consciencia del cambio que vamos a sufrir y sigo viendo a muchos políticos y líderes empresariales gestionando las cosas, como si este Tsunami fuera a pasar como una simple crisis. Pero la realidad es que no es una recesión pasajera: esta ola lo va a arrasar todo, no solo por la virulencia con la que ha detenido la economía global y nuestras vidas, sino por lo que tardaremos en recuperar 100% la normalidad, que ocurrirá antes de 12/18 meses, y eso solamente conseguimos una vacuna eficaz y logramos inmunizar a todo el planeta: 7.000 millones de personas.
Solo hay que ver cómo todos los indicadores se están disparando sin precedentes en las series históricas, desde el paro en USA, al PIB Europeo o la producción en China.
Fase 1: Tomar conciencia de la situación
Dejando a un lado el devastador efecto económico, hay que entender la situación tan atípica y dramática que está viviendo la población en todo el mundo, aislada en sus casas, sufriendo una pandemia y viendo una caída drástica de los negocios y el empleo. Lo que está cambiando por completo los hábitos de consumo, preocupaciones y, en consecuencia, nuestra manera de ver el futuro.
Solo hay que “escuchar”, las conversaciones digitales en todo el planeta para entender el cambio tan radical del consumidor que estamos viviendo y tomarlo como referente para poder visualizar como va a cambiar todo.
Pero no todo son malas noticias: el planeta respira aliviado, ya que su peor virus invasor, el ser humano, se encuentra en fase de hibernación. Esto tiene como consecuencia inevitable un descenso radical de las emisiones de CO2 en todo el mundo; la naturaleza está empezando a recuperar su espacio invadido por el hombre.
Al mismo tiempo, vemos todos los días cómo se están sucediendo los casos de solidaridad, tanto por parte de los empresarios, como de toda la ciudadanía, así como una respuesta modélica de nuestros médicos, enfermeras, cuerpos de seguridad y todas aquellas personas que proveen de productos básicos.
Fase 2: Resetear
En el campo de la medicina, un buen diagnóstico nos permite un tratamiento adecuado y, por ende, la curación lo antes posible. Para ello, es crítico entender cómo esta emergencia sanitaria va a transformar todo el tejido productivo para siempre y, con él, nuestro modelo de vida.
“Es el momento de resetear, de empezar de cero. El mercado NUNCA volverá a ser el mismo”
Con lo que hay que adaptar radicalmente las estrategias empresariales y de todos los negocios del planeta, no solo para los años de crisis post COVID que vamos a vivir, sino porque el mercado jamás volverá a ser él mismo.
Fase 3: Reinventar
Estamos redibujando nuestro futuro y hay dos ejes estratégicos que debemos abrazar e interiorizar en nuestras vidas y negocios, para no desparecer como especie. El primero es el impacto social y medio ambiental. Es evidente que nuestro estilo de vida y consumo es autodestructivo y, en gran medida innecesario. El simple hecho de pararnos ha evidenciado no solo nuestro efecto negativo en el mundo, sino que ha puesto en evidencia que es posible un modelo de vida distinto. El segundo es la tecnología, es sorprendente como la mayoría de negocios se están realizando sin problemas de manera digital, a la vez que la biotecnología desarrolla una vacuna en tiempo récord, y que vemos cómo podemos estar conectados, informados y entretenidos sin salir de casa, al mismo tiempo que fabricamos material sanitario en 3D print, y comprobamos que inteligencia artificial será capaz de prever futuras pandemias.
Es más que evidente que los negocios ganadores, de nuestro nuevo mundo, serán aquellos que tengan en el centro de su estrategia el impacto social y la tecnología, no solo porqué el consumidor lo va a demandar, sino porque nuestra supervivencia dependerá de ello.
Conclusión
El Covid19 solo da una oportunidad
Esto no es una crisis, es una oportunidad para reinventarnos y rediseñar el tipo de mundo que todos necesitamos, para sobrevivir los próximos 100 años y progresar adecuadamente como especie y en armonía con nuestro entorno. Para ello, nuestra clase política y empresarial, así como las instituciones, ha de tomar consciencia de las señales y crear las políticas y las empresas del futuro que necesitamos.
El Covid19 es tan solo una señal, un llamamiento a cambiar el rumbo erróneo que habíamos tomado, creando una desigualdad indigna en el mundo, destruyendo el ecosistema, y empobreciendo nuestras almas. Pero hemos de aprovecharlo: no habrá más oportunidades como esta.
Espero de corazón que nos demos cuento como seres humanos, y que nada vuelva a ser como antes. Es el momento de redibujar un mundo mejor para nuestros hijos y nietos.