Que opinarías sobre un país donde el 28% de los niños, niñas y adolescentes no puedan permitirse comer carne, pollo o pescado al menos una vez cada dos días, ni fruta y verdura a diario, que viven en casas sin una temperatura adecuada, que no cuentan con ropa, calzado o libros adecuados, o que no pueden participar en actividades de ocio o irse de vacaciones una vez al año….y si además te dijera que es un país “rico” o denominado “primer mundo”…..seguramente no darías crédito. ¡Ese país es España!
La pobreza infantil es una realidad desgarradora que afecta a millones de niños en todo el mundo. Según UNICEF, aproximadamente 1.000 millones de niños viven en condiciones de pobreza multidimensional, lo que significa que carecen de necesidades básicas como alimentos nutritivos o agua potable. Además, se estima que 333 millones de niños viven en extrema pobreza, luchando por sobrevivir con menos de 2,15 dólares al día. Estos niños a menudo carecen de acceso a alimentos adecuados, saneamiento, vivienda, atención médica y educación, lo que tiene graves consecuencias para su desarrollo físico, cognitivo y social.
Como España, la pobreza infantil no solo afecta a los países en desarrollo, sino que también es un problema significativo en las naciones más ricas. Incluso en estos países, uno de cada siete niños vive en la pobreza. La situación se ha visto exacerbada por crisis compuestas, como desastres relacionados con el clima, conflictos y la pandemia de COVID-19, que han estancado el progreso para los niños más vulnerables.
En cuanto al ranking de pobreza infantil en países de la OCDE en 2021, Costa Rica tiene el porcentaje más alto de niños viviendo en pobreza, le sigue Turquía y España. Por otro lado, solo el 3% de los niños en Finlandia viven en la pobreza. Los países que mejor desempeño tuvieron en los indicadores de bienestar infantil fueron las naciones nórdicas, Alemania y Suiza. En contraste, los países con altos niveles de pobreza infantil incluyen a Chile, Bulgaria, Rumania, México y Estados Unidos.
La pobreza infantil tiene consecuencias devastadoras a largo plazo. Los niños que crecen en la pobreza suelen tener menos habilidades para la fuerza laboral y ganan salarios más bajos como adultos. Esto perpetúa un ciclo de pobreza que puede continuar durante generaciones. Por lo tanto, es crucial que los gobiernos y las organizaciones internacionales trabajen juntos para abordar este problema de manera integral.
UNICEF y el Banco Mundial han estado a la vanguardia de la producción de estadísticas globales sobre la pobreza infantil extrema, lo que ayuda a guiar a los responsables de la formulación de políticas. Además, UNICEF trabaja con gobiernos y socios en políticas y programas integrados respaldados por los recursos necesarios para ponerlos en práctica. Esto incluye la expansión de programas de protección social sensibles a la infancia, como los beneficios universales para niños, que han demostrado tener un impacto positivo en la salud, la educación y la nutrición de los niños.
En resumen, la pobreza infantil es un desafío global que afecta tanto a países en desarrollo como desarrollados. Y yo me pregunto, ¿Qué estamos haciendo las empresas para solucionar este grave problema, que sin duda nos afecta como seres humanos, y como empresarios?
De momento solo ONG,s o empresas desde sus plataformas filantrópicas, están trabajando en este grave problema, como:
Varias empresas y organizaciones en todo el mundo están trabajando activamente para ayudar a paliar la pobreza infantil. Algunas de estas incluyen:
– Children International: Esta organización sin fines de lucro lucha contra la pobreza y ayuda a los niños y jóvenes necesitados a través de programas, centros comunitarios y equipos solidarios. Ofrecen apadrinamiento de niños, lo que permite a los donantes ayudar a los niños a recibir atención médica, educación, habilidades para la vida y formación laboral¹.
– Innovations for Poverty Action (IPA): Es una organización dedicada a la investigación y la formulación de políticas que busca descubrir y promover soluciones eficaces a los problemas mundiales de pobreza. Utilizan un enfoque científico basado en pruebas para mejorar la vida de los pobres del mundo².
– Oxfam International: Esta organización ofrece soluciones a todos los niveles, desde el suministro de suministros de emergencia y socorro en casos de desastre hasta la solución de problemas en la fuente. Trabajan para asegurarse de que la próxima generación de personas que viven cerca de la pobreza tenga la educación y los recursos para ascender².
– Give Directly: Es conocida por sus enfoques innovadores y directos para permitir a las familias salir de la pobreza. Proporcionan transferencias de dinero directas a las personas que viven en pobreza extrema².
–Unilever: A través de su Fundación Unilever, esta empresa multinacional trabaja en programas de higiene, acceso al agua potable y mejora de la nutrición, lo que beneficia directamente a los niños en comunidades vulnerables.
– Google: Mediante Google.org, la rama filantrópica de Google, la empresa apoya proyectos educativos y de desarrollo tecnológico que pueden ayudar a los niños en situación de pobreza a acceder a una mejor educación y oportunidades.
–Starbucks: La Fundación Starbucks se enfoca en programas de apoyo a la juventud, proporcionando oportunidades de empleo y capacitación para jóvenes en comunidades de bajos ingresos.
–Microsoft: A través de su iniciativa Microsoft Philanthropies, la empresa apoya programas de educación y tecnología que benefician a los niños y jóvenes en situación de pobreza.
Además de la necesidad que los gobiernos actúen, es imperativos que las empresas tomen conciencia de esta situación, y miren como integrar en sus estrategias empresariales productos y servicios, que ayuden a paliar esta grave situación, no solo con ayudas puntuales o filantrópicas, sino con soluciones estructurales.
La economía del propósito es sin duda parte de la solución.