Cuando uno piensa en innovación automáticamente le aparece a la mente Steve Jobs presentando el Ipod y revolucionando el mercado de la música, o a Mark Zuckerberg lanzando TheFacebook (ese era el nombre original) y creando el mundo de las redes sociales. Pero en realidad eso no es innovación, son simplemente genialidades de gente que estuvo en el sitio adecuado, en el momento adecuado, con la idea precisa, y tuvo la habilidad de transformarla en un negocio de éxito.
En realidad la innovación empresarial, yo la defino como aquel proceso de análisis y reflexión que permite cambiar procesos establecidos en la empresa, lanzar o evolucionar productos y servicios o simplemente hacer las cosas de una manera diferente.
Qué es la innovación empresarial
La innovación no es un ejercicio creativo ni esporádico, es un proceso. Para que la innovación sea sostenible e impacte en los resultados ha de estar estructurada y ser medida. En caso contrario desaparecerá. No depende de un solo “genio” que invente, sino que tiene que ser un proceso de creación que involucre a toda la organización. Lógicamente siempre ha de haber un líder que lo promueva, pero es vital que forme parte del día a día de una organización.
Cuando me paro a pensar en ejemplos de innovación en nuestro país, se me ocurren cientos. Desde los DOTS de Europastry (la versión congelada del Donut que ha revolucionado el mercado), pasando por el Üsuaia de Ibiza (que ha reinventado el concepto de hotel-discoteca), hasta celebrar las campanadas de fin de año con cerveza de Estrella Galicia (creando un alto impacto mediático al cambiar el tradicional brindis con cava de todos los años).
Me atrevo a afirmar que tenemos empresas y empresarios con un alto grado de capacidad de innovación. Pero no es menos cierto que hay otras muchas compañías que están sufriendo el efecto de la digitalización y no son capaces de innovar y adaptarse al cambio.
Para poder innovar es importante seguir un proceso estructurado que permita impulsar y monetizar la empresa:
1º Identificando oportunidades: Crear el mayor número de canales posibles de insights, tanto de empleados, como de colaboradores y fuentes externas.
2º Desarrollando conceptos: Primer filtro para ver qué conceptos pueden ser analizados como posibles proyectos de innovación en la compañía.
3º Creando modelos de negocio: Siguiente filtro para poder crear “business plan” de aquellos conceptos más ganadores de inicio.
4º Desarrollando prototipos: Se empiezan a desarrollar maquetas, prototipos o diseños de aquellos modelos de negocio que parezcan más rentables.
5º Probando y validando: Se lanzan a poner en el mercado pruebas piloto de aquellos desarrollos más factibles para una posible prueba real.
6º Comercializando e implementando: Se lanzan como proyectos y/o productos de innovación aquellas pruebas que hayan sido un éxito en el mercado y corroboren el business plan.
Las tipologías de innovación que somos capaces de generar son:
FINANZAS
1. Nuevos modelo de negocio: ¿Cómo hacer dinero?
2. Nuevas redes o alianzas: ¿Cómo unir fuerzas con otros?
PROCESOS
3. Mejora de procesos: ¿Cómo los hago más eficientes?
4. Nuevos procesos: ¿Cómo creo o añado valor al proceso actual?
OFERTA
5. Nuevo desempeño de los productos: ¿Cómo mejoro el porfolio actual?
6. Nuevos productos: ¿Cómo lanzo nuevas categorías de productos?
7. Nuevos servicios: ¿Cómo añado más valor a mi oferta de productos actual?
ENTREGA
8. Nuevos canales: ¿Cómo llego a mis clientes o a nuevos clientes a través de otros canales?