Este sábado pasado fue el 75 aniversario de una organización de gran importancia, especialmente con la situación que estamos viviendo: Las Naciones Unidas. Analizamos los retos que tiene por delante, su potencial y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Hoy más que nunca, la ONU tiene un papel crítico.
Este pasado sábado 24 de octubre se cumplieron 75 años desde la fundación de Naciones Unidas. El Día de la ONU marca el aniversario de la entrada en vigor en 1945 de la Carta de las Naciones Unidas. Con la ratificación de este documento fundacional de la mayoría de los países en el mundo, las Naciones Unidas entraron oficialmente en vigor.
No hay otra organización mundial que tenga la legitimidad, el poder de convocatoria y el impacto normativo de las Naciones Unidas. Rara vez ha sido tan urgente que todos los países sumen esfuerzos para cumplir la promesa de que las naciones permanezcan unidas.
La pandemia de la COVID-19 nos ha recordado de la manera más elocuente posible que estamos estrechamente interconectados y únicamente trabajando juntos y con espíritu de solidaridad podremos crear resiliencia contra futuras pandemias y otros problemas mundiales. Esta pandemia va más allá de una emergencia sanitaria. Es también una crisis económica, humanitaria, de seguridad y de derechos humanos. Ha puesto de manifiesto fragilidades y desigualdades muy graves entre países y dentro de ellos. Para salir de esta crisis será necesario un enfoque que incluya de manera integral a sociedades, gobiernos y al mundo entero en general, impulsado por la compasión y la solidaridad. El Secretario General de la ONU ha lanzado la Respuesta Integral de las Naciones Unidas frente al COVID-19 con el objetivo de salvar vidas, proteger la sociedad y facilitar una recuperación que nos lleve a un lugar mejor.
No hay otra organización mundial que tenga la legitimidad, el poder de convocatoria y el impacto normativo de las Naciones Unidas
Siendo la única organización mundial de verdadero carácter universal, las Naciones Unidas son el principal foro global en el que abordar cuestiones que trascienden las fronteras nacionales y no pueden ser resueltas por un solo país. El 25 de septiembre de 2015, los líderes mundiales adoptaron un conjunto de objetivos globales para erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todos como parte de una nueva agenda de desarrollo sostenible, llamados ODS, objetivos de desarrollo sostenible. Cada objetivo tiene metas específicas que deben alcanzarse en los próximos 15 años. Para alcanzar estas metas, todo el mundo tiene que hacer su parte: los gobiernos, el sector privado, la sociedad civil y personas como TÚ.
Los ODS de la ONU: un reto esencial para el mundo de hoy
Acabar con la pobreza extrema. Luchar contra la desigualdad y la injusticia. Solucionar el problema del cambio climático. Los objetivos mundiales son importantes, son objetivos que cambiarán el mundo y para los que será necesaria la cooperación entre los gobiernos, las organizaciones internacionales y los líderes mundiales. Parece imposible que las personas de a pie puedan influir en algo. ¿Vas a rendirte sin más? ¡No! El cambio empieza por ti. De verdad. Todos y cada uno de los seres humanos del mundo, hasta los más indiferentes y perezosos, forman parte de la solución. Por suerte, hay cosas facilísimas que podemos introducir en nuestra rutina y, si todos lo hacemos, lograremos grandes cambios. La ONU lo ha puesto fácil y ha recopilado tan solo unas cuantas cosas de las muchas que puede hacer cualquier persona para obtener resultados (haz clic aquí para descargar algunas de las acciones en formato PDF).
Hoy más que nunca, la ONU tiene un papel crítico. El mundo y la especie humana están en peligro, y nuestra contribución individual, así como la de nuestras empresas, es fundamental.
¡¡Feliz aniversario, Naciones Unidas!!