Desde hace 15 años estoy intentando impulsar un nuevo modelo empresarial, que no solo ponga el foco en el rendimiento económico, sino también en su impacto positivo en el planeta y la sociedad. Sin duda UnLtd ha sido uno de los pioneros en este ecosistema en España y en el mundo anglosajón y, con esta fundación que busca la transformación social a través de la empresa, hemos contribuido a crear y desarrollar iniciativas maravillosas como el Círculo de amigos (El mayor think tank de impacto social de España), pero lo más maravilloso es contribuir a inspirar a otros como Transcendent (especialistas en transformar empresas a Impacto) o Foro Impacto y el NAB (la asociación del sector de impacto), así como cientos de Startups, empresarios y fondos de inversión, que han puesto en el centro de sus estrategias el impacto social y medioambiental.
Aún así, nos queda mucho camino por recorrer; esto no ha hecho más que empezar y no pararé hasta convertir a España en un referente mundial en empresas de impacto: es un proyecto de vida.
Estos últimos años, y acelerado por la pandemia, han ido apareciendo situaciones y movimientos, que aprovechándose de la “moda” del impacto social y medio ambiental, han “trufado” a sus compañías con acciones sociales, certificados medioambientales/sociales, o incluso creando compañías de supuesto impacto social. Estos personajes son los denominados “greenwashers”, es decir, personas que enmascaran un “yo” y unas prácticas empresariales sin importarles de verdad el planeta o el ser humano y simplemente buscan conseguir más negocio o reconocimiento personal.
“Mi proyecto de vida es convertir a España en un referente mundial en empresas de impacto”
Es complejo a veces distinguirlos de las verdaderos nuevas líderes de la economía de impacto, con lo que aquí os dejo una pequeña guía para desenmascararlos:
Pasado: Analizar su pasado, su trayectoria, sus sensibilidades sociales, medioambientales o filantrópicas. Los Greenwashers no las tienen.
Estilo de vida: Conocer su estilo de vida y ver si pone en práctica en su vida personal lo que prodiga en su vida empresarial o ejecutiva. Los Greenwashers viven al puro estilo siglo XX: puro consumismo y especulación.
Profundizar: Un activista del impacto social y medioambiental suele llevar años trabajando y desarrollando proyectos sociales, o colaborando con ellos y normalmente se rodea de personas con mucha experiencia en estos campos. Un Greenwashers suele trabajar solo para maximizar sus beneficios de la “oportunidad”.
Resiliencia: Las personas que ponen el impacto social en el centro de su estrategia empresarial, suelen tener negocios con propósitos muy sólidos y resistentes, con visión a largo plazo. Los Greenwashing solo ponen foco en el rendimiento económico a corto plazo, escudándose en hacer un mundo mejor.
Bondad: En general el impacto social y medioambiental está muy relacionada con el respeto por el planeta y la especie humana, lo que conlleva a la bondad y la generosidad. Los Greenwashers se caracterizan por el egoísmo y la falsedad.
Los Greenwashers disfrazan su respeto por el planeta
Para mí lo más complejo es diferenciar entre los Greenwashers y los “nuevos” convencidos de la economía de impacto. Mi experiencia me dice que solo el tiempo los desenmascara y pone a cada uno en su sitio.
En todo caso, aun habiendo sufrido muchas decepciones de personas y empresas que me han utilizado para su único beneficio, prefiero estar rodeado de Greenwashers que de personas que no hagan nada.
¡Nuestro planeta y nuestra sociedad se merecen un mundo mejor!